Hay que ver lo redundantes que sonamos cuando decimos: si es que me falta el tiempo y el que tengo me sobra. Sonrío al pensar que todos somos igual de ingenuos, hipócritas y desorganizados, compañeros del tiempo os confirmo lo que ya sabeís; no, nuestros problemas con el reloj de sol no acabarán nunca y si, tratar de parar las agujas es una batalla perdida. Buenas noches y buena suerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario